Archivo

Posts Tagged ‘Marvel’

Amor que persevera

Vision: Wanda, no diré que entiendo cómo te sientes, pero me gustaría hacerlo. Si tan sólo quisieras contarme. Tal vez eso te confortaría.
Wanda: ¿Qué te hace pensar que hablar de ello me confortaría?
Vision: Oh, ya veo, puedo entender que…
Wanda: Lo único que me confortaría, sería verlo una vez más. Perdona, estoy muy cansada. Es… como una ola que me pasa por encima una y otra vez. Me derriba y… cuando intento levantarme, viene otra vez por mí… y no puedo… terminará por ahogarme.
Vision: No, no lo hará.
Wanda: ¿Cómo lo sabes?
Vision: Porque no puede ser todo tristeza, ¿o sí? Yo siempre he estado solo, así que nunca he sentido tristeza. Es cuanto conozco. Nunca he vivido una pérdida. Nunca he tenido un ser querido al cuál perder. Pero, ¿qué es la pena, sino amor perseverante?

– Wandavision (2021)

Ojo de halcón

No soy perfecto.

Soy sólo un hombre. No puedo salvarlos a todos, apenas y me puedo salvar a mí mismo.

Pero, ¿eso significa que debería rendirme? Por supuesto que no.

– Clint Barton (Hawkeye, 2015)

Been there, read that (CCII)

Thanos, un instante cuántico

Aut. Barry Lyga

portada_thanos-un-instante-cuantico_marvel_201902271937He disfrutado muchísimo el desarrollo del MCU (Universo Cinemático Marvel), en más de una de las películas he terminado con lágrimas en los ojos, he disfrutado los momentos trágicos y  he sonreído ante los finales felices (¿alguien dijo, el Capitán América bailando con Peggy?). Sin embargo, mi única gran crítica ha sido con respecto a los villanos y las modificaciones que han recibido para que puedan encajar en este mundo del live action.

Me refiero a que la mayoría de villanos han visto una reducción del trasfondo bajo el cuál surgen su motivaciones para ser precisamente «los malos». A Ultrón lo pusieron a cantar y a hacer malos chistes; al Barón Zemo lo convirtieron en un padre de familia que se quería vengar; Ego quería destruir la vida del universos nada más porque le parecía demasiado «simple», etcétera, etcétera, etcétera.

Thanos, mi personaje favorito de toda la vida, recibió el mismo trato: eliminaron su motivación principal, su deseo de enamorar a la Dama de la Muerte; con ello, establecieron a un ser sumamente poderoso cuyo motivo para eliminar a la mitad de los seres vivos del universo era el de «salvarlos»; si me preguntan, sonaba bastante ilógico o carente de argumentos.

Si lo vemos de esta forma, la motivación suena sumamente simplista y vemos a un Thanos con rostro de tristeza la mayor parte del tiempo sin entender del todo qué es aquello que lo alegra una vez que cumple su cometido al final de Infinity War. Quien sigue los cómics (la historia «real» o canon), sabrá que Thanos es un personaje cuya motivación principal, más allá de la grandeza, es el amor.

Y entonces, apareció esta novela escrita por Barry Lyga que parece ser la disculpa directa contra todos aquellos que no quedamos satisfechos con el desarrollo de nuestro Titán Loco. Les diré algo, disculpa aceptada.

En Un instante cuántico veremos la historia previa a Infinity War del cine: el nacimiento de Thanos, la relación distante con su padre, el único ser que lo tolera pues, por su deformidad y color, Thanos es rechazado por la sociedad de su planeta natal. Veremos cómo conoce a su único amigo, Sintaa, y cómo después recibirá su primer beso por parte de una chica que conoce en lo que nosotros consideraríamos como un antro.

A partir de ese beso, es que Thanos entenderá que debe salvar al resto de titanes de un inminente desastre producido por la sobrepoblación del planeta. Al comunicar sus hallazgos, será juzgado y exiliado del planeta. El titán comenzará un viaje que lo guiará a través del espacio para ser convertido en esclavo de un alien que se mira como un rey; será llevado al borde de la muerte tras un enfrentamiento con asgardianos; tendrá su primer encuentro con el que será su ejército chitauri y, finalmente, regresará a su hogar para darse cuenta de que tuvo razón y su pueblo se extinguió.

Al final entenderemos cuál es la motivación de Thanos y cuál será su primer acercamiento a las gemas del infinito y cómo es que el villano que vimos en las películas se hizo con la primera de estas gemas junto con esa cicatriz en el rostro sobre la que muchos fanáticos especulamos en algún momento previo al estreno de la película.

Me encantó entender que la motivación que pareció ausente en las películas, no dejó de ser la misma que el personaje tiene en los cómics. En definitiva, se disfruta este viaje que resolverá algunos misterios pequeños que dejaron abiertos las primeras películas. Este libro fue un regalo de cumpleaños el año pasado y creo que fue el momento perfecto para leerlo y darme cuenta de que elegí muy bien a mi villano favorito.

Un instante cuántico

5481448-thanos2016002-deodato

—Empezaste tu ciclo vital en desventaja. Eras una monstruosidad y un anormal en un mundo que se regía por la conformidad y el orden. Aprendiste una lección importante: los que son excelentes y destacan son abatidos por las excusas de los mediocres.

—Algunos no eran así —replicó Thanos y se acordó de Gwinth y lo que le había dicho: «No soy como mis padres. No tengo miedo ni siento odio sólo porque algo es diferente».

Y entonces, Thanos supo cuál sería su cuento. Sólo era suyo y no tenía que ver con guerra o muerte. Era, como bien sabía, el momento que lo definió; uno de luz y amor.

Besé a una mujer —comentó Thanos poco a poco—. Una muy especial.

El Lorespeaker alzó la mirada.

—El Señor de la Guerra tiene un corazón, después de todo. Continúa.

El beso había sucedido hacía mucho tiempo. Vidas completas. Al principio, no estaba seguro de acordarse del beso con precisión. Experimentó un momento de horror cuando se dio cuenta de que no se acordaba del rostro de Gwinth. La cara de la mujer de sus sueños había reemplazado a la del beso. Sólo recordaba a la mujer que atormentaba sus sueños desde que lo habían exiliado.

Pero el momento de horror pasó muy rápido. Luego, descubrió que cuando se forzó a recordar el beso, también brotaron otros recuerdos. Vio con claridad la caminata entre la multitud; las calles obstruidas de Ciudad Eterna rodeadas por los que ya estaban muertos; a Sintaa que lo empujaba para que dejara a un lado su obstinación y entrara al silencurium.

Y se acordó de la chica. La chica con el cabello al ras de color rojo brillante, la piel de un color amarillo claro con pecas verdes. Y la primera vez que le sonrió con timidez al moverse para que el entonces joven titán se pudiera sentar. Jamás volvería a olvidar su rostro. No lo permitiría.

También se acordó de la bebida verde, burbujeante y muy dulce que ingirió esa noche. Sabía a melón, bayas de sáuco y alcohol etílico. Pudo saborearla como si la estuviera bebiendo.

Y todas esas memorias por un único beso: su primero. El beso que detonó su necesidad por tener una conexión y por entenderse a sí mismo para poder crear vínculos con los demás. Ese beso fue la primera vez que sintió la ternura de dos seres que se acoplaban.

—Me sentía incompleto —confesó Thanos—. Pero con ese beso supe que si me esmeraba y si me convertía en la persona que necesitaba ser, entonces podría capturar el sentimiento que había necesitado todo este tiempo; que el beso tendría un significado. Lo supe en ese entonces y lo sigo buscando. Si puedo salvar al universo, entonces me convertiré en el Thanos que es merecedor de un beso.

Aunque llevaba su armadura, jamás se había sentido tan vulnerable en toda su vida. Ni siquiera cuando estuvo a punto de morir por el hacha de Yrsa.

Thanos podía contarle más, si era necesario. La manera en la que había encontrado el valor para ir con su madre y el desconsuelo de su encuentro. Todo estaba dentro de él y podía recordarlo sin importar cuán vulnerable se sentía. Si eso lo guiaba al poder capaz de salvar al universo, entonces valdría la pena.

El Lorespeaker sonrió con sinceridad, como si fuera un niño.

—Qué hermosa anécdota, Thanos. Gracias por compartirla.

—¿Es todo? —preguntó con voz ronca.

El titán sintió las extremidades dormidas y los músculos torcidos. No era un niño enamoradizo, herido de amor o con el corazón roto. Era un señor de la guerra. Un conquistador. Lo único que hizo fue desenterrar un recuerdo que entregó voluntariamente, pero no dejaría que el recuerdo se apoderara de él. Había cosas más importantes que le deparaba el futuro. El pasado se podía quedar atrás.

—Es todo. —Su interlocutor asintió lentamente.

—Entonces cuéntame sobre las gemas infinitas.

 

– Fragmento de Thanos, Un instante cuántico, de Barry Lyga.

Valor

RCO022_1572476303 - copia

Si evitamos la batalla porque hay poca esperanza de victoria, ¿dónde estaría entonces el valor?

Que sea la meta lo que nos motive, no las probabilidades.

– Norrin Radd (Silver Surfer Black, 2019)

Los últimos 4 meses de mi vida…

3 noviembre 2019 2 comentarios

IMG_20191101_201934

…y ya estoy de pie una vez más, listo para la siguiente ronda de madrazos que la vida me quiera mandar.

«Pase lo que pase mañana…

8 octubre 2019 1 comentario

 

…prométeme una cosa. Que seguirás siendo quien eres. No un soldado perfecto, sino un buen hombre.»

 

original

Matar al diablo para acabar con el pecado

Kingpin_03

Algo que me provoca demasiado conflicto, es el hecho de que existan tantas personas en posiciones de poder e influencia que hacen todo lo posible por importunar a sus semejantes teniendo la capacidad de hacer su trabajo y, con esto, crear una verdadera diferencia para los demás. Miraba esta miniserie en Netflix, Así nos ven, en la que ni los policías ni los fiscales de distrito se preocuparon un poco por resolver un crimen y prefirieron inculpar a un montón de menores de edad por un acto delictivo que no cometieron, tan sólo por su color de piel; realmente les destruyeron las vidas en su afán de tener rápidamente a un culpable.

A diario convivo con personas que perjudican a los demás sin ningún motivo. Incluso he tenido que lidiar con autoridades a quienes en mi vida he volteado a ver pero tal parece que les molesta visualizar a alguien haciendo bien su trabajo y ocupándose de lo suyo y de sus seres queridos. Bajo esta presión, muchas veces desearíamos hacer que todas esas personas pagaran lo que hacen, muchas veces deseamos hacer que exista esa ausente justicia aún si tenemos que utilizar nuestras propias manos.

Justo esto platicaba con mi inSecta hace apenas un par de horas. Pero, siendo como somos, entendimos que no podemos comportarnos como aquellos seres pues eso nos haría iguales o peores que ellos. En ese justo momento, saltó a mí  el recuerdo de una escena de la primera temporada de la serie de Daredevil que me dejó muy marcado.

Una vez que el protagonista descubre la verdadera identidad del Kingpin, Wilson Fisk, y que se da cuenta de que no importa el ponerlo en la cárcel pues con el poder económico e influencias que tiene, será fácil para el villano escapar de la justicia, Murdock piensa en la posibilidad de acabar con la vida de quien él considera es el verdadero diablo (después de todo, es Fisk el autor intelectual de la distribución de drogas, de la trata de personas, del contrabando y de todos los crímenes que asolan el barrio de Hell’s Kitchen en Nueva York); de este modo, si sabes quién es el diablo, puedes asesinarlo y, de esta manera, acabar con el pecado. Previo a realizar el acto, el héroe decide confesarse con el Padre Lantom. Lo que el religioso le contesta a Matt, creo es una belleza de reflexión:

Matt-Murdock-Lantom-Funeral-1024x576

–Padre, sé que mi alma se condenará si acabo con su vida. Pero si me quedo sin hacer nada, si dejo que él consuma la ciudad, mucha gente sufrirá y morirá.

Hay un margen muy amplio entre no hacer nada y asesinar, Matthew. El mal de otro hombre no te hace a ti bueno. Los hombres han utilizado las atrocidades de sus enemigos para justificar las propias a lo largo de la historia. Así que la pregunta que debes hacerte es: ¿estás luchando con el hecho de que no deseas matar a este hombre pero tienes que hacerlo o más bien no tienes que matarlo pero quieres hacerlo? “Si el justo se doblega ante el perverso es como contaminar una fuente o enturbiar un manantial” Proverbios 25 o algo así, nunca me acuerdo. Significando con ello que el hombre recto tiene el deber de levantarse ante el mal. Esa es una interpretación. La otra es que, cuando el hombre recto sucumbe al pecado, es tan dañino como si se echase veneno a una fuente pública. Porque la oscuridad contenida en el acto de quitar una vida se expandirá a los amigos, los vecinos y la comunidad entera.

Creo que todos, tarde o temprano, recibimos lo justo por nuestras acciones. Al final, de una u otra manera, seremos juzgados. Es difícil convivir con esta idea cuando somos testigos de tanta injusticia; pero, precisamente, es esto lo que nos divide entre personas de bien y personas de mal.

¿Qué haría el Hombre Araña?

Categorías: Imágenes Etiquetas: , , ,

Feliz cumpleaños, héroe

LukeCagebitch

Hace unos días llegué a cumplir los 32 años de edad. No tengo mucho qué reflexionar. Ha sido un año de altas y bajas; tuve medio año lleno de dicha, y tuve otra mitad llena de soledad y melancolía, añoranzas que hasta el día de hoy no se cumplen (y no sé si se cumplirán). Un año es demasiado tiempo. Demasiadas personas fueron y vinieron, demasiados logros (que yo no los considero logros, sino obligaciones) acontecieron, y mucho crecimiento personal, eso sí.

Hoy, no me queda más que enfrentar un nuevo año lleno de expectativas e incertidumbre. Tanto cambió en los últimos doce meses, no tengo ni idea de todo lo que cambiará en los siguientes.

Sigo trabajando en ser un mejor hombre que un día deje de sentirse indigno de la felicidad que siempre ha buscado. Aunque me inclino hacia el lado de la villanía, lo cierto es que nunca he dejado de desear ser un verdadero héroe que inspire confianza, amor, esperanza y respeto a los que me rodean. Comparto el monólogo final del padre de Luke Cage en los últimos minutos de la segunda temporada:

Your strength is from God, Carl. I have no doubt in my mind about it. But with that kind of power, comes a share of pain. I know that. Science, magic, God… the power flows from within. From inside. What comes out when the pressure is hideous… that’s the real magic. That’s what defines being a man. Thats’s what defines being a hero.

(Tu fortaleza viene de Dios, Carl. No tengo la menor duda. Pero ese tipo de poder viene con su parte de dolor. Lo sé. Ciencia, magia, Dios… Ese poder fluye desde el interior. Desde adentro. Lo que sale cuando esa presión es muy fuerte… esa es la magia real. Eso define ser un hombre. Eso define ser un héroe.)

«Hay quienes huyen de las sirenas, y hay quienes corremos hacia ellas«