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Posts Tagged ‘Series’

Been there, read that (CCXXXIX)

Tiempo de odio (Saga de Geralt de Rivia, Libro IV)

Aut. Andrzej Sapkowski

Les diría, «no me hagan empezar con todo lo malo que hay en la segunda temporada de The Witcher, porque no me van a parar la boca» (o las manos en este caso). Y es que, entre más leo la obra de Sapkowski, más detesto lo que los productores están haciendo en la serie. No soy un ser irrascible, entiendo que la serie es una adaptación, es decir que está basada en los libros pero el detalle está justo ahí, en que está «basada»; sin embargo, veamos el caso de Game of Thrones, nacida de la saga de Canción de hielo y fuego, en la que, sin contar las últimas dos temporadas, la historia en la pantalla no perdió la trama ni el detalle de los libros en lo más mínimo. Si bien los libros de George R. R. Martin son monstruos de más de 800 páginas y en la serie no se podrían haber incluido todas y cada una de las líneas argumentales originales, la producción de HBO honró cada página y arco argumental de los personajes principales sin sacrificar su calidad. Sí, hubo personajes que fallecieron cuando no debían (como Barristan Selmy que en el libro que sigue y que aún no se publica es un personaje protagonista) y otros que no aparecieron más (como Lady Stoneheart, también conocida como Catelyn Tully que sí sobrevive a la Boda Roja), pero nada de lo omitido afecta el desarrollo de la historia entrañable que vimos en pantalla y, lo principal, no se modificaron ni las motivaciones ni las esencias de los personajes.

Sólo por mencionar algunas quejas, diré lo siguiente (advertencia de SPOILERS): Ciri jamás le pide a ningún brujo que la conviertan a través del uso del suero; Ciri emprende un viaje con Yennefer, pero es por petición de Geralt dado que el brujo desea que ellas se mantengan en movimiento mientras él da caza a quienes las persiguen; Yennefer JAMÁS pierde su capacidad mágica y es ella quien con su magia derrota y deja con cicatrices en el rostro a Rience; Rience (el mago de fuego) nunca ataca directamente el cuartel de los brujos, Kaer Morhen, y por supuesto que Vezemir y el resto de los brujos jamás resultan heridos o muertos; Ciri no convoca monstruos de ningún tipo en ningún momento, más bien su don es el de funcionar como un oráculo; Geralt y los enanos de Yarpen Zigrin no enfrentaron soldados nilfgaardianos, por el contrario, son atacados por elfos bandoleros; finalmente, la más grande estupidez, eso de que el emperador Emhyr resulta ser el padre de Ciri, es algo que realmente se lo sacaron de lo más profundo del intestino grueso. Una verdadera pena lo que destruyeron en la serie.

Bueno, ya que lo saqué de mi sistema, procedo a seguir con mis comentarios sobre el libro. En esta ocasión, Ciri ha abandonado su entrenamiento brujeril ya que, por petición de Geralt, emprenderá un viaje al lado de Yennefer rumbo a la escuela de magia donde esta última aprendió todo lo que sabe. Es de este modo que Geralt se encargará de buscar y matar a todos aquellos que buscan a Ciri, pues ven en la chica las llaves al trono legítimo de Cintra. Mientras esto acontece alrededor de los protagonistas, nos daremos cuenta de que el tiempo de odio ha llegado: los reyes traman una guerra en contra de Nilfgaard pero lo hacen sin tener confianza en los hechiceros que combatieron en Sodden, éstos últimos a su vez, comienzan sus propias maquinaciones y terminan teniendo divisiones internas tan profundas que el caos se desata cuando el consejo se reúne y la sangre es derramada en más de una ocasión. Traiciones y alianzas se dan a diestra y siniestra. La muerte acecha por todos lados y nuestros héroes parecen estar solos y atrapados en el medio de la lucha de facciones.

Vaya que se ha puesto interesante, cada que creemos que tendremos un respiro tanto nosotros lectores como personajes, surge una nueva complicación y pareciera que nunca vamos a tener un momento feliz o romántico (aunque es obvio que sí los hay). A estas alturas ya no puedo decir que recomiendo o no el libro, si ya leíste el anterior es obvio que estarás más que clavado en la historia. Como yo, que no puedo esperar a leer la siguiente parte.

Amor que persevera

Vision: Wanda, no diré que entiendo cómo te sientes, pero me gustaría hacerlo. Si tan sólo quisieras contarme. Tal vez eso te confortaría.
Wanda: ¿Qué te hace pensar que hablar de ello me confortaría?
Vision: Oh, ya veo, puedo entender que…
Wanda: Lo único que me confortaría, sería verlo una vez más. Perdona, estoy muy cansada. Es… como una ola que me pasa por encima una y otra vez. Me derriba y… cuando intento levantarme, viene otra vez por mí… y no puedo… terminará por ahogarme.
Vision: No, no lo hará.
Wanda: ¿Cómo lo sabes?
Vision: Porque no puede ser todo tristeza, ¿o sí? Yo siempre he estado solo, así que nunca he sentido tristeza. Es cuanto conozco. Nunca he vivido una pérdida. Nunca he tenido un ser querido al cuál perder. Pero, ¿qué es la pena, sino amor perseverante?

– Wandavision (2021)

Been there, read that (CCXII)

15 noviembre 2020 1 comentario

La espada del destino

Aut. Andrzej Sapkowski

Hace algunos meses, siete para ser exactos, terminé de leer el primer tomo de la ahora muy bien conocida Saga de Geralt de Rivia. Culminaba la lectura con gran beneplácito y, al mismo tiempo, con fuerte crítica a la serie basada en el libro. Mi descontento partía del hecho que, en la serie, decidieron retratar a un brujo sumamente soberbio y mal hablado en contraste con el noble y torturado personaje que protagoniza la novela. Apenas ayer, terminé el segundo tomo y la crítica se mantiene aunque, siendo honesto, en este libro Geralt es definitivamente más mal hablado, tema que adjudico a la traducción.

Por otro lado, en la reseña de El último deseo, establecí la hipótesis de que muy probablemente la hasta ahora única temporada de la serie estuviese basada no sólo en ese primer libro, sino en el segundo también. Dicha suposición tenía que ver con el hecho de que Yennefer sólo aparecía en uno de los siete cuentos que conforman el volumen. Pues bien, hipótesis confirmada, la serie está basada más en este segundo libro que en el primero pues cuatro de los seis cuentos, son capítulos directos de dicha serie y, como lo supuse, en la mayoría aparece la figura de la hechicera de Vengerberg.

Ahora bien, hay que aclarar aquí una pequeña cuestión: en términos de fecha de publicación, La espada del destino (1992) es el primer libro de la saga y no El último deseo (1993); sin embargo, existe un acuerdo tácito por parte del autor y los lectores en el que la historia, cronológicamente hablando, acontece primero a través de El último deseo. A final de cuentas, estaré siguiendo la cronología de las traducciones en español que se ajustan a la segunda forma.

En fin, no hablaré más del libro puesto que, si ya viste la primera temporada de la serie, prácticamente ya leíste el 50% del primer libro y el 50% del segundo. De manera análoga, si ya leíste los dos primeros libros, mi nueva hipótesis es que ya viste la segunda temporada aún cuando no se ha terminado de filmar. Ya veremos el próximo año si he de confirmar otra teoría.

Postdata. Mi cuento favorito de este libro es «Un pequeño sacrificio»; definitivamente, una historia muy dulce y tierna con un final digno de lágrimas que muero por ver en la pantalla.

Been there, read that (CC)

Orange is the new black / Crónica de mi año en una prisión federal

Aut. Piper Kerman

orange-is-the-new-black_9788434414983Hay de dos sopas cuando relacionas una obra escrita con una producción cinematográfica/televisiva basada en la misma: O lees antes de mirar, o miras para después leer. En cualquiera de los dos casos el resultado es también uno de dos, o hubo justicia o no la hubo con respecto a lo que quiso expresar el autor. Ahora bien, en este punto de mi vida aún no decido qué prefiero hacer antes, leer o mirar. Me ha pasado que, si leo primero, disfruto muchísimo hallar poco a poco los detalles que se trasladan directamente del libro hacia la pantalla aunque termino berreando cuando algo que consideraba importante no es tomado en cuenta; por el contrario, cuando miro primero, cierta parte de la imaginación se ve truncada pues la imagen mental de los personajes ya viene desarrollada y no puedes hacerte una nueva idea de ellos.

Orange is the new black lo he leído casi un año después del término de la última temporada de la serie televisiva. A la serie la amé y, curiosamente, al libro no tanto. Es de esas excepciones a la regla que enuncié al inicio de la presente entrada. Aclaro, disfruté muchísimo el libro, pero el enfoque de la historia es diametralmente opuesto al que se le dio en la pantalla chica.

Contrario a la serie, el libro sólo tiene una perspectiva, la de Piper, y este hecho evita el desarrollo de la infinidad de personajes que tiene la otra versión. Por supuesto, pecaría de ingenuo si hubiese imaginado que en un libro de 360 páginas cabría el desarrollo, las historias y los dramas de más de 30 personajes que se muestran a lo largo de 7 temporadas. Aún así, en la crónica de Piper, no hallé referencia a más de 10 de los personajes considerados principales dentro del desarrollo televisivo y tales referencias, en la mayoría de casos, no rebasaban uno o dos páginas en total de todo el libro.

Por otro lado, me quedó mucho más claro el objetivo de los productores de la serie: la concienciación en torno al sistema penintenciario de Estados Unidos y las complejidades que dan a las corrientes feministas su razón de ser. En un mundo donde cada vez más los seres humanos son vistos como cifras y menos como seres vivos, la crónica de Piper es un claro testimonio de las terribles fallas de un sistema de justicia punitivo y del gran nivel de segregación tanto racial como de género que existe no sólo en el país de las estrellas y las franjas.

La gran ventaja de Piper en ese año que pasó en la prisión federal de Danbury: su posición económica y social, y su color de piel. Ella misma lo admite en múltiples ocasiones y reflexiona constantemente en lo terrible que hubiera sido su estancia en la prisión de no tener todas esas características. Definitivamente, da mucho qué pensar.

En fin, cosas que me veo obligado a mencionar: Si bien el verdadero nombre de Alex es Nora, la relación que tuvieron no fue más que algo temporal;, de hecho, Nora no es mencionada más que en un par de páginas al inicio de la historia y en un par de páginas justo al final de la misma. No hubo final feliz entre la protagonista y la mujer que, en palabras de ella, la delató con los federales (Piper no se entregó de forma voluntaria como lo hacen ver al inicio de la serie).

Algo importante para el desarrollo del personaje en la serie y que no pasó en la realidad, fue el abandono por parte de su prometido, Larry. En la vida real él fue el puerto seguro que le dio la estabilidad emocional y mental a Piper para sobreponerse a su estadía en la cárcel; él la visitó casi cada fin de semana y, al día de hoy, siguen felizmente casados.

Los únicos dos personajes que se desarrollan un poco más y que son fácilmente identificados como principales en la serie son, curiosamente, mis dos presas favoritas: Pennsatucky y Pop, mejor conocida como «Roja». Spoiler bonito del libro, Pennsatucky sí recibió su certificado de estudios y no murió por una sobredosis; Roja, siendo precisamente la jefa de la cocina, no sufrió de Alzheimer ni fue condenada a cadena perpetua, en la vida real, fue liberada una semana antes que Piper tras cumplir una condena de 12 años.

No existe ningún Sr. Caputo y en la crónica de Piper no existió jamás alguno de los guardias que toman roles importantes en la serie. Ojos locos sí tuvo un interés romántico en la protagonista, pero no duró más de un par de días cuando se dio cuenta que la rubia no tenía interés en ella. Ninguna prisionera falleció durante la estadía de Piper en la cárcel, no hubo ningún motín.

Como lo mencioné, amé la versión televisiva mientras que el libro me resultó menos interesante. Sin duda lo recomendaría a cualquier fanático de la serie pero no lo recomendaría para quien no la ha visto porque, precisamente, preferiría que la vieran en la plataforma de su elección.

 

Been there, read that (CXCIV)

El último deseo (Saga de Geralt de Rivia, Libro I)

Aut. Andrzej Sapkowski

978849889127Me pasó con Game of Thrones (Canción de fuego y hielo), descubrí que esa serie, cuya primera temporada acababa de disfrutar en demasía, estaba basada en un conjunto de novelas y no tardé en hacerme con los libros que, por cierto, fueron un bellísimo regalo por parte de una gran mujer a la que le dio flojera leer los cuatro libros de más de 900 páginas que eran en esos tiempos. El caso de The Witcher no es tan intenso, hablamos de ocho volúmenes de La Saga de Geralt de Rivia (siete en realidad, pero el último en dos tomos) y una precuela, y ninguno rebasa las 300 páginas de extensión. Técnicamente, sin tomar en cuenta los libros aún no publicados de la historia de George R. R. Martin, estamos hablando de la mitad de volumen en la obra de Andrzej Sapkowski.

Ahora bien, lejos de la extensión, una diferencia determinante es que los libros de la saga del brujo no son novelas como tal, sino una colección de cuentos protagonizados por el mismo personaje y que se unen a través de una historia más corta. De este modo, la lectura de las aventuras del personaje no es lineal y cada episodio se encuentra en una línea temporal distinta. Precisamente esto último fue lo que provocó ciertas confusiones al ver la serie televisiva y sólo en los últimos capítulos se capta que ciertas escenas pertenecen al pasado mientras que otras son más recientes.

Borrando el recuerdo de la última temporada de la serie de GoT, algo que disfruté en esos tiempos fue que los personajes hacían una total reverencia a sus contrapartes literarias. Leer a Tyrion, Jamie, Jon Snow y Daenerys, era mirarlos en la pantalla. No ha sido así con Geralt, Jaskier o Yennefer. La imagen que el brujo tiene en la serie es una elaborada en torno a un personaje mal hablado, egoísta y soberbio que le cuesta trabajo reconocer sus sentimientos hacia los demás y tiene la manía de maldecir. Ciertos sucesos determinantes en la historia parecieran darse más por una mala decisión del personaje o por el puro azar. Por el contrario, el Geralt de los libros es un personaje mucho más caballeresco, es cortés, prefiere guardar silencio antes que insultar y atesora la amistad con Jasker y Nenneke, mientras que los eventos importantes están muy bien planeados en la psique del lobo blanco.

Un ejemplo claro de esto último, es la escena en la que Geralt obtiene el Derecho de la Sorpresa del caballero erizo, Dunny. Si bien en la serie se maneja como una metida de pata porque se dan cuenta que la hija de la reina Calanthe está embarazada justo después de haber sido otorgado el derecho (momento que se maneja de manera chusca con un marcado «Fuck!» por parte de Geralt mientras todo lo observan en silencio), en el libro, Geralt es consciente del embarazo de la princesa y, con el deseo en mente de tener un aprendiz, pide el derecho de la sorpresa sabiéndolo de antemano. No fue ningún accidente.

Me queda claro también que, al menos la primera temporada de la serie podría estar basada no sólo en el primer libro (se afirmaba que habría una temporada por cada tomo) ya que de este hay un par de escenas no vistas en la serie y de Yennefer sólo se habla en las últimas 30 páginas. El título, El último deseo, hace referencia directa del momento en que Geralt pide su último deseo al genio (D’jinn) que Yennefer trata de capturar. Diferencia importante: en la serie, el último deseo es desconocido por Yennefer y provoca un rompimiento con el brujo una vez que ella se entera de éste mucho tiempo después; en el libro, el deseo se formula frente a la hechicera y éste provoca un fuerte impacto en ella, propiciando el inicio de la relación entre los dos personajes.

En fin, aunque me indigna, también me agrada saber que disfrutaré por doble las historia del brujo pues tales diferencias provocarán grandes discrepancias entre lo narrado por el autor y lo producido en televisión. Del mismo modo que Canción de Fuego y Hielo tiene personajes vivos que en la serie eliminaron, en The Witcher veremos motivaciones diferentes y desenlaces variables.

Por cierto, me encantó el libro y no puedo esperar para ponerle mis manos encima a cada uno de los tomos que me faltan. Seguidor o no de la serie, es una gran alternativa una vez que Lord of the rings y A song of ice and fire han pasado a formar parte del imaginario público y el hambre de literatura fantástica ha hecho lo contrario a disminuir.

A donde nos lleve el universo

15 octubre 2019 2 comentarios

Been there, read that (CLXIX)

Secuencias de una vida

Aut. Bryan Cranston

51QdoEc9OqL._SX322_BO1,204,203,200_Uno de mis fines de semana más productivos, incluyó terminar de sacar todos los logros de un videojuego, Metro: Exodus; ver toda una temporada de una de mis series, la cuarta de Gotham; y darle fin a la lectura de un libro que arrastré desde hace casi dos meses, Secuencias de una vida. Sí, fue sarcasmo lo de un fin de semana «productivo», pero para alguien con indicios de trastorno obsesivo compulsivo como un servidor, es necesario finalizar pendientes insignificantes antes de dedicar tiempo completo al proyecto bueno: la tesis doctoral (que ya cuenta con fecha límite firmada del 30 de septiembre).

No soy admirador de las autobiografías, tengo muy pocas en mi haber como lector. Sin embargo, ¿Cómo habría de negarme a leer las memorias del Papá de Malcolm, el mismísimo Heisenberg/Walter White? Si hasta el día de hoy, consumo todo lo que tenga que ver con Breaking Bad, una de esas series que marcó mi vida y cuyos personajes he añorado a través del tie-in Better Call Saul y, ahora, a través de la película que recién se anunció la semana pasada.

Lo cierto, es que pensé que me encontraría con muchas anécdotas que girasen alrededor de las series mencionada; por el contrario, el actor en verdad se abre en el libro y narra cada una de las fases de su vida y todas esas anécdotas que moldearon su carácter y su estilo actoral. Comenzamos con un Bryan infante que se ganaba unas monedas matando gallinas para un carnicero, luego, el adolescente que emprende un viaje en motocicleta atravesando el país; encontraremos las historias de los amores que provocaron desde tristeza y decepción hasta deseos de asesinar (por increíble que parezca). Todo, encaminándose a la realización de toda una vida.

Por supuesto que las anécdotas más memorables las encontramos en el período de Malcolm y Breaking Bad; pero lejos de lo curioso, encontramos a un hombre que aprecia a todas y cada una de las relaciones laborales y que no deja de dar crédito a quienes lo merecen, desde sus coprotagonistas, hasta el hombre de iluminación y a la chica del vestuario. Nos daremos cuenta que hasta el más mínimo detalle cuenta, como el hecho de que en algún momento, Bryan se negaba a utilizar el tipo de calzones que todos recordamos del primer capítulo del papel de su vida.

Como todo en la vida, hay momentos obscuros y difíciles de desempleo y de profunda depresión; creo que, en lo personal, mucho de lo que Cranston narra, me ha ayudado en un momento sumamente difícil de la vida. Pero, hey, precisamente fueron esos momentos en los que la vida pareció golpearlo más duro, los que lo encaminaron a ser el héroe/villano que tanto amamos por allá del 2012.

Me encantó su narración y amé cada momento trágico y divertido descrito. Sin duda, Bryan es un actor de esos que se colocan como un perfecto modelo a seguir. Sólo espero a que pronto llegue el papel de mi vida. Su lectura me dio nuevos aires, justo el día en que más lo necesitaba, encontré las palabras justas en una de sus páginas que se combinaron con un mensaje de la mujer que amo y que me colocaron de nuevo en el ring, listo para luchar un round más contra la vida.

Feliz cumpleaños, héroe

LukeCagebitch

Hace unos días llegué a cumplir los 32 años de edad. No tengo mucho qué reflexionar. Ha sido un año de altas y bajas; tuve medio año lleno de dicha, y tuve otra mitad llena de soledad y melancolía, añoranzas que hasta el día de hoy no se cumplen (y no sé si se cumplirán). Un año es demasiado tiempo. Demasiadas personas fueron y vinieron, demasiados logros (que yo no los considero logros, sino obligaciones) acontecieron, y mucho crecimiento personal, eso sí.

Hoy, no me queda más que enfrentar un nuevo año lleno de expectativas e incertidumbre. Tanto cambió en los últimos doce meses, no tengo ni idea de todo lo que cambiará en los siguientes.

Sigo trabajando en ser un mejor hombre que un día deje de sentirse indigno de la felicidad que siempre ha buscado. Aunque me inclino hacia el lado de la villanía, lo cierto es que nunca he dejado de desear ser un verdadero héroe que inspire confianza, amor, esperanza y respeto a los que me rodean. Comparto el monólogo final del padre de Luke Cage en los últimos minutos de la segunda temporada:

Your strength is from God, Carl. I have no doubt in my mind about it. But with that kind of power, comes a share of pain. I know that. Science, magic, God… the power flows from within. From inside. What comes out when the pressure is hideous… that’s the real magic. That’s what defines being a man. Thats’s what defines being a hero.

(Tu fortaleza viene de Dios, Carl. No tengo la menor duda. Pero ese tipo de poder viene con su parte de dolor. Lo sé. Ciencia, magia, Dios… Ese poder fluye desde el interior. Desde adentro. Lo que sale cuando esa presión es muy fuerte… esa es la magia real. Eso define ser un hombre. Eso define ser un héroe.)

«Hay quienes huyen de las sirenas, y hay quienes corremos hacia ellas«

Las coincidencias de un final de temporada

Tiene un muy buen rato desde la última vez que me tomé un tiempo para publicar en el blog. Mi entrada al doctorado ha vuelto muy difícil la administración de mi tiempo y, ciertamente, aprovecho los pequeños espacios vacacionales para ponerme al día con mis series, videojuegos, cómics, libros, escritos y películas; ese es el caso de la presente entrada.

Justo acabo de disfrutar del final de la primera temporada de la serie de Daredevil y aunque es algo tarde, no me quise quedar sin compartir algo que me hizo sentir cosquilleos en el interior de mi cuerpo. Daredevil es una serie maravillosa, leí tantas reseñas de fans que la aclamaban, que desde hace varios meses planeaba verla; el destino quiso que la viera justo hasta este fin de semana en el que me di la oportunidad de disfrutar de las cosas para las que no dispongo de tiempo en temporada de clases. A pesar de que también existen quienes la consideran aburrida, supongo que la serie me provoca un feeling especial cuando veo trasladadas todas esas historias de superhéroes con las que sueño al televisor (o pantalla, pues); a pesar de mis 30 años de edad, jamás he dejado de fantasear con ser el superhéroe que salva el día, que protege a los inocentes, que es aclamado por todos, que se enfrenta al mal que no puede ser dominado a través de los medios convencionales. En fin.

Hubo dos grandes coincidencias (alerta de spoiler para quien no ha visto la serie) que me hacen amar la idea de éstas y de que a veces recibimos señales inesperadas.

Primero, después de mucho esfuerzo, Daredevil logra mantener a salvo al testigo que finalmente mostrará al mundo el monstruo que es nuestro futuro Kingpin, Wilson Fisk. Una vez que vemos el inicio de la declaración del testigo ante el FBI, comienza una secuencia de escenas que muestran cómo cada uno de los implicados en los crímenes de Fisk son capturados por las fuerzas federales; todo esto, en escenas de cámara lenta que se hace acompañar de una pieza musical: Nessum Dorma.

Y es aquí donde la coincidencia hace su aparición, pues es Nessum Dorma una de esas piezas musicales muy especiales para mí y que en la mayoría de ocasiones que llega a mis oídos, me hace lagrimear. «Que nadie duerma» recita el tenor, narrando la historia de la cruel princesa Turandot, que le dará su mano en matrimonio al príncipe cuyo nombre no conoce; «al alba venceré» recita el príncipe cuando sabe que al primer rayo de sol habrá ganado. Una descripción perfecta de mi necedad de enamorarme de princesas crueles, y una grata sorpresa en este final de temporada.

Segundo, considero que una coincidencia es más fuerte si viene acompañada de otra que la vaticina. En este caso, la pieza musical sólo fue el anuncio de aquello que me dejó helado. Soy creyente, no entraré en detalles pero lo soy y asisto a misa la mayor parte de los domingos del año. Pues bien, antier asistí a la celebración dominical y una de las lecturas fue la muy conocida parábola del buen samaritano. Cuál ha sido mi sorpresa en este final de temporada, Wilson Fisk es arrestado y puesto a resguardo en un vehículo del FBI. Durante el traslado, Fisk se dirige a los dos uniformados encargados de vigilarlo y tras admitir que no es religioso pero que «ha leído partes de la biblia por curiosidad», decide narrarles una historia… la parábola del buen samaritano.

wilson-fisk-daredevil

No lo sé, a veces creo que las coincidencias son demasiado bellas como para ignorarlas. ¿Cuál era la posibilidad de que viera este final de temporada justo un día después de otro día en el que por poco y no asisto a misa a escuchar la misma historia que el villano narra? A pesar de que tuve la serie completa en mi computadora durante meses fue hasta esta semana en que decidí verla; unas horas antes, me preguntaba qué de diferente tendría mi vida si decidiera cruzar umbrales que me acercan más a lo obscuro que a lo claro de mi personalidad.

Coincidencias, destino, eventos no correlacionados, sólo coincidencias. Si el Kingpin decidió ser el mal que asaltó al hombre herido al que el buen samaritano cuidó, ¿qué es lo habré de decidir el día en que se me presente esa opción?

Been there, read that (CXXX)

16 febrero 2015 1 comentario

A Song of Ice and Fire, Book Five: A Dance with Dragons

Aut. George R. R. Martin

10664113La verdad, es que me quedé picado después de Festín de Cuervos, no me quedó de otra que aplicar el «de una vez» y me aventé el quinto y último (en salir) de la serie de libros que encierran esta fantasía épica. Sí, Danza es el mejor hasta el momento, aquí nos encontramos con los hechos que rodean a los personajes «principales» de la historia: Tyrion, Daenerys, Jon Snow, aderezados con una embarradita de Barristan Selmy, Cersei y Jaime Lannister, Aria, Davos Seaworth, Asha y Theon Greyjoy.

Y vaya que hacían falta los personajes principales pues muchas amistades lectoras se quejaban de la ausencia de ellos en el tomo anterior. La cronología del quinto libro comienza al mismo tiempo que el volumen anterior y, posteriormente, se extiende más allá. Mientras los hechos narrados en A Feast for Crows acontecen en el centro y capital de Westeros, A Dance with Dragons nos lleva a la zona externa del continente, a los límites del norte en la muralla y a las Ciudades Libres, en donde seguiremos a Tyrion en su lucha por llegar a Daenerys y a ésta, enfrentándose a una inminente guerra en contra de la ciudad que ha liberado de la esclavitud.

Jon Snow se encuentra en medio de una carrera contra reloj para reunir una fuerza considerable que posea la capacidad de enfrentar a Los Otros, cuya presencia es inminente. Lo anterior, lo obliga a reclutar a quienes fuesen los enemigos jurados de su orden, la gente libre. Todo esto atraerá el descontento de sus compañeros cuervos, que poco a poco tramarán conjuras en su contra.

Danza de Dragones es largo, sí, pero un largo necesario pues las historias comienzan a apuntar hacia lo que será una reunión decisiva de tramas y personajes en lo que serán los dos últimos libros. Las historias se vuelven indispensables entre sí y no habrá oportunidad de saltarse ninguna, siempre queriendo avanzar un capítulo más para saber qué es lo que ha pasado con otros personajes que no tienen sus propios capítulos, pero que no dejan de ser importantes a través de la visualización que nos proporcionan los primarios.

A estas alturas, no hace falta recomendar, si eres fan de la serie y leíste los anteriores, éste es el libro obligado para recibir la quinta temporada en televisión sin tantas sorpresas (ojalá).