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Posts Tagged ‘Grandes Obras’

Been there, read that (CXII)

Rayuela

Aut. Julio Cortázar

RayuelaDespués de unas buenas clases de literatura, era inevitable ignorar esa edición de 50 aniversario que mi Señora Madre hizo el favor de obsequiarme con motivo de mi cumpleaños hace doce meses. Y qué mejor regalo pude recibir, apenas le doy vuelta a la última página y sonrío. Sonrío y me pregunto cómo es posible que le quepa tanta genialidad a alguien dentro de la cabeza, pero bueno, es Cortázar.

No voy a ponerme a criticar o a analizar o cualquier acción y efecto referido al estudio profundo de una obra como lo es Rayuela, para eso hay cientos y cientos de coloquios, mesas redondas, tesis y estudios, académicamente hablando. Sólo puedo recomendarlo y recomendar a más no poder.

Cortázar habla dentro de sus cartas y al interior de sus clases sobre el deseo que tenía de salirse de las normas estipuladas, de escribir algo que fuera en contra de lo considerado como sagrado dentro de la palabra escrita, y lo logra. Al mismo tiempo, habla también de la múltiple correspondencia que recibió por parte de tantos lectores; mientras unos alabababan, otros detestaban y había otros más que simplemente reían.

En efecto, Rayuela puede provocar las más variadas reacciones de acuerdo al lector. Mientras a mí me ha provocado risa una y otra vez, he sido testigo de cómo amistades mías han terminado odiando la actitud de los personajes y hasta sus conversaciones. Y de entre tantas sensaciones, lo genial de la obra se encuentra ahí, en lo que provoca.

Ya se había dicho, cómo podemos encontrar lo lúdico sin caer en la comicidad, cómo podemos encontrar la fatalidad sin caer en obviedades, cómo podemos jugar con el tiempo sin necesidad de forzar. Cómo poder echar abajo las estructuras tradicionales y aún así estar dentro de los círculos más altos.

Todo eso y más ha sido Rayuela, se disfruta, se ríe, se enoja, se angustia, se fallece y se revive una y otra vez más.

Been there, read that (CVIII)

El crepúsculo de los ídolos

Aut. Friedrich Nietzche

9788441322011«He dado a la humanidad el libro más profundo que posee, mi Zaratustra: le daré dentro de poco el más independiente». Es la frase con la que el filósofo alemán concluye la parte medular de su libro, el más independiente de ellos. En efecto, Nietzche publica El crepúsculo de los ídolos como uno de sus tres últimos libros, el más personal en cuanto a opiniones e ideas a la contra.

Despotricando contra las ideas de Platón y Sócrates, Friedrich se aboca en demostrar cómo la decadencia del espíritu griego y el razonamiento humano actual siguen las mismas conductas y patrones. El desprecio a una Alemania cuyo «reich» no es más que la antitesis de un país que antes resultaba poderoso y puntero del pensamiento y el avance cultural, se presenta una y otra vez.

Es posible observar el surgimiento de ideas que más adelante el mismo Adolf Hitler utilizaría a su modo: el sistema educativo sin orden y que busca una producción en serie de seres humanos sin capacidad de razonamiento o manejo del sentido común, la religión y su manera de manipular al ser humano, de convertirlo en un ser lleno de limitaciones atadas a la moral que los mismos jerarcas de la iglesia no profesan.

Entre otras tantas ideas, la obra de Nietzche es una obra obligada en el estudio del autor y como un parteaguas del pensamiento moderno. Un clásico de la filosofía.

Been there, read that (LXXVII)

La insoportable levedad del ser

Aut. Milan Kundera

La Insoportable Levedad del SerUn clásico que realmente no requiere presentaciones (y mucho menos críticas) es lo que terminé de leer hace unas semanas. El Señor Kundera nos da una muestra de maestría en esta obra, obligada para todo amante de la literatura en general. Cuatro historias enlazadas por el amor, un amor de distinto tipo para cada una y que en ocasiones puede ser platónico, mientras que en otras no es más que el resultado de una enferma dependencia entre las personas. ¿Es el fuerte demasiado débil o el débil demasiado fuerte?

Situados en momentos claves de la invasión comunista y del fracaso de esta misma sociedad, hay fuertes críticas al régimen así como también al mundo opuesto. La clave aquí, está en lo efímero de la vida, en la imposibilidad que tenemos de vivir nuestra vida dos veces y, por lo tanto, la incapacidad que tendríamos de tomar las mejores decisiones, la incapacidad de poseer prueba y error para mejorar la existencia individual que se vuelve tan leve.

Y al final, ¿qué es lo que queda de la existencia de cada uno? Un ideal en el aire, un viejo perro con cáncer enterrado en el patio trasero, una pareja muerta en un accidente de auto, una artista que recuerda a su amante a través del sombrero de su bisabuelo. Todo esto está encerrado en La insoportable levedad del ser, y todo eso no es más que la punta de un enorme iceberg.

Reconciliación con Hitler

milan-kundera

No hace mucho me sorprendí a mí mismo con una sensación increíble: estaba hojeando un libro sobre Hitler y al ver algunas de las fotografías me emocioné: me habían recordado el tiempo de mi infancia; la viví durante la guerra; algunos de mis parientes murieron en los campos de concentración de Hitler; pero ¿qué era su muerte en comparación con el hecho de que las fotografías de Hitler me habían recordado un tiempo pasado de mi vida, un tiempo que no volverá?

Esta reconciliación con Hitler demuestra la profunda perversión moral que va unida a un mundo basado esencialmente en la inexistencia del retorno, porque en ese mundo todo esta perdonado de antemano y, por tanto, todo cínicamente permitido.

– Milan Kundera en La insoportable levedad del ser.

Been there, read that (LXII)

La Vida es Sueño

Aut. Pedro Calderón de la Barca

Son curiosas ciertas coincidencias, más cuando se trata de coincidencias que rayan en lo absurdo; es decir, cuando de plano parecen todo menos lo que son. Hace un par de meses hubo una feria del libro en mi ciudad natal y por tan sólo 15 pesos me hice de un ejemplar de la obra presente y otra de Sergio Pitol, 15 pesos por cada uno y me regalaban un lapicero y un separador de libros ¡caray!

Hasta ahí todo bien, como mi librero de pendientes siempre está lleno, tardé varias semanas para comenzar a leer el libro en cuestión y, curiosamente, lo empecé a leer a inicio de mes justo cuando salía a la venta el número propio de mi revista favorita. Dentro de la revista venía un artículo que habla de cierta necedad de los gobiernos por hacer tirajes masivos de obras clásicas que superan la demanda con creces y que al pasar de los años, años de estar embodegados, simplemente no se agotan y representan un gasto inútil que no cumple con su cometido de introducir la lectura en los ciudadanos jóvenes; eso sí, sirven para justificar gastos y tener un antecedente de «impulso a la educación».

Precisamente, se me ocurre revisar mi copia de La Vida es Sueño y encuentro que su impresión fue hace 10 años por parte del gobierno de mi estado (Veracruz). Y he ahí mi coincidencia al observar que su tiraje fue de mil ejemplares que, una década después, no se han agotado y se venden a un precio que, estoy seguro, no vale ni el papel en el que se imprimió.

Fuera de eso, no podría ponerme a criticar mucho el texto, un clásico entre los clásicos, la obra de Calderón de la Barca se compone de una serie de diálogos teatrales que toman el tema de los sueños y su asociación con la realidad; dice el autor que «la vida es sueño y los sueños, sueños son». Atiborrado de soliloquios totalmente memorables, La Vida trata de un rey que ha decidido mantener a su primogénito, el heredero legítimo del trono, en una prisión pues éste ha sido previsto como un hombre ruín y malvado.

Segismundo, el hijo, un día es drogado y se le devuelve al castillo donde, viéndose como príncipe, se encarga de ser un déspota y tirano; comprobando su teoría, el rey Basilio lo duerme y lo devuelve a su prisión, de este modo el príncipe cree que su breve gobierno ha sido un sueño. Posteriormente, el pueblo libera a Segismundo y lo urge a reclamar su trono de forma violenta, él al pensar nuevamente que se trata todo de un sueño, se comporta de mejor manera a modo de experimento y termina convirtiéndose en un rey justo y aclamado.

Sin duda una obra excelente que maneja temas muy agradables y que posee discursos interesantes dignos de ser tomados en cuenta en el quehacer diario. Una obra obligada.

Been there, read that (XLIII)

Dibujos

Aut. Franz Kafka

«Déjenme hablarles de un gran artista, Franz Kafka», es la frase con la que Max Brod describiría su actividad como coleccionista y archivero de múltiples bocetos y dibujos que Franz Kafka realizó a la largo de su vida. Que si el debate se ha centrado entre si su obra recurre al impresionismo o a otra corriente pictórica, es lo que menos importa cuando nos hemos hecho con una copia de la presente obra que reune 40 diferentes ilustraciones que se acompañan de textos del autor de La Metamorfosis.

No hay mucho qué decir, un seguidor de la literatura kafkiana no tendrá problema en reconocer la procedencia de cada texto que acompaña a los elementos gráficos que, como lo indica el título del libro, son el atractivo principal al ser las únicas 40 piezas del arte de Franz conocidas hasta la fecha y reunidas en un sólo lugar. Existen más dibujos pero, como es mencionado por la nota editorial, se encuentra bajo llave y guardados recelosamente del público en general por parte de una dama que se encarga de cuidarlos.

Los textos son sublimes y los dibujos algo diferente y digno de una exposición montada en alguno de los museos más famosos. Mientras que algunos trazos se acompañan del texto con el que precisamente fueron concebidos, otros textos fueron elegidos por su referencia a la imagen.

Definitivamente es una de las mejores compras navideñas que pude realizar. Precisamente, al no ser una obra escrita completa, su lectura se hace amena y veloz debido al espacio dedicado a los dibujos. Recomendable tanto para el lector no familiarizado como para aquel que se puede jactar de conocer la obra completa del autor. Me atrevo a decir que sirve también para aquellas personas que no pueden centrar su atención sólo en letras y que prefieren los libros «que tienen dibujitos«.

El carácter de un líder

He, who the sword of heaven will bear,

Should be as holy as severe;

Pattern in himself to know,

Grace to stand, and virtue to go;

More nor less to others paying,

Than by self-offences weighing.

Shame to him, whose cruel striking

Kills for faults on his own liking.

– W. Shakespeare a través del personaje Angelo en su obra Measure for Measure.

Conocer la necesidades de los demás, saber lo que se necesita hacer y hacerlo, ser el ejemplo, ser bondadoso en tiempos de paz  e implacable en la adversidad; todo esto debe ser un líder y, ante todo, tiene que conocerse a sí mismo.

Been there, read that (XXXIII)

Diario

Aut. Ana Frank

Terminé de leer la presente obra por segunda ocasión (en la primera tendría yo unos 10 años de edad) y uno de los primeros pensamientos que atravesaron mi mente fue decir en voz alta «lo siento«. En verdad que es así, me invade una cierta tristeza el pensar en el hubiera de esta niña que, a sus 13 años de edad, escribía y concretaba ideas mejor que muchos adultos en plenitud; tal vez, de no haber sucedido nada de lo que pasó, hubiera terminado brillando por sus obras una vez convertida en periodista, como soñó serlo en alguna ocasión.

«El ejemplo perfecto del hubiera», es el título que le pondría a sus narraciones. Lejos del contexto en que se desarrolla la escritura de las cartas a Kitty, el diario nos muestra los anhelos, disgustos, planes e inspiraciones de una pequeña niña que vivió demasiado en muy poco tiempo.

Muchas veces me detuve y traté de recordar el tipo de pensamientos que un servidor tenía a esa misma edad, me di cuenta de que eran similares. Y es que, en la secundaria, el estudio siempre preocupa aún cuando no se asiste a la escuela; nunca falta el creer que se ama a alguien que tal vez sólo nos gusta, falta experiencia aquí, falta experiencia allá.

Me entristece también darme cuenta de qué tan parecida a mí era esta jovencita, yo también amaba la mitología y gustaba de los árboles genealógicos a su edad. Lo siento mucho Ana, el destino decidió darte un corto tiempo de vida, después te dio la inmortalidad.

El Diario es una lectura obligatoria no importando si el tema de la Segunda Gran Guerra es de tu agrado o no. Es trascendente, honesta y pura. Escrita por un ser humano que se vio en el medio del más grande conflicto de la historia de la humanidad y, por tanto, es un ejemplo perfecto de la esperanza, que puede ser muchas veces nuestra única fuente de inspiración.

Ya ella lo intuía en sus últimas páginas, sentía que podría terminar en cualquier momento, y no creía que su diario pudiese servir como testimonio del sufrimiento que acontecía en las personas afectadas por el gran conflicto armado.

Ojalá hubieses podido aguantar un par de meses más Ana, ojalá lo hubieras hecho.

Been there, read that (XXXII)

La Metamorfosis

Aut. Franz Kafka

Aut. Franz KafkaRegreso a lo clásico y básico, me topo ahora con otra gran obra narrativa: La Metamorfosis. Antes de pasar a mis pseudo análisis de rigor, me pregunto ¿Acaso no les ha tocado conversar con algún intento de pensador moderno que defiende su intelectualidad mencionando que ha leído todo lo de Kafka?

Admito que no tuve antes la oportunidad de leer al autor, pero ahora que lo he hecho, no encuentro más que a uno de los grandes que merecen ser leídos y que manejan temas bastante complejos. Sin embargo, no me hallo como un hombre más sabio o con una diferencia de pensamiento por el sólo hecho de haber leído a Franz. Supongo que todo tenía que ver realmente con el bluff «He leído a Kafka y eso me hace ser muy chingón», ¡pamplinas!

La Metamorfosis comprende una serie de narraciones de temática y desarrollo diferente: Un hombre que se ha transfomardo en insecto de la noche a la mañana; el muchacho que teme importunar a su amigo con la noticia de su boda; el oficial que desea la manutención de una compleja pena de muerte en una colonia militar; el profesional que busca apoyar a un viejo maestro de pueblo a difundir un antiguo hallazgo.

En verdad que no tengo muchas palabras para describir la obra, al principio pareciera que hemos encontrado un autor más con buenas historias, no es así; de alguna manera, las narraciones tienen elementos que nos hacen sentir ese pequeño escalofrío por las noches y un sentimiento de empatía por los personajes que se desarrollan en un trasfondo de tragedia inminente. Tres de las cuatro historias terminan con el factor muerte, suicidio, ya sea voluntario o forzoso.

Al mismo tiempo, a pesar de su final, nos quedaremos siempre preguntándonos si en verdad es ese el término de la historia, teniendo una esperanza de recibir más información en páginas posteriores.

Sí, creo que esa es una buena descripción de lo que he terminado de leer. Más de uno exclamará «¡Pobre Gregorio!»; todavía más lectores se asombrarán de la ingratitud de esa familia, esperando no sufrir algo igual o pensando no conocer lo que la propia familia podría hacer si tales eventos les acontecieran.

Been there, read that (XXX)

Fausto

Aut. J. W. Goethe

Todos lo hemos pensado en algún momento o, por lo menos, bromeado al respecto: Mataría por (inserte deseo morboso, avaro, sucio o noble), Daría lo que fuera por hacer o tener tal cosa. Y yo me pregunto, ¿Que tal si vendemos el alma al único con los medios necesarios para pagar el precio que le queramos poner?

Tal es la premisa de esta obra clásica entre los clásicos, Fausto, del alemán Johan Wolfgang Goethe. Dividida en dos partes, Fausto es una serie de diálogos teatrales, sin muchas acotaciones, que  nos mostrarán el tormento de un hombre que, en aras de saber más que cualquier otro, venderá su alma a Mefistófeles quien ha hecho una apuesta al Padre para desviar a su hijo favorito, el mismo Doctor Fausto.

La primera parte de la obra mostrará, tras los acontecimientos mencionados, la tragedia romántica entre el protagonista y la mujer que se ha apoderado de su corazón, Margarita. Teniendo siempre como fiel acompañante al cornudo, pasaremos de un inocente enamoramiento al conflicto que provoca un enfrentamiento mortal en contra del hermano de su amada; finalmente, bajaremos el telón con la aparente pérdida de un alma por amor.

La segunda parte, publicada el mismo año de la muerte del autor, llevará a Fausto a escenarios históricos y míticos donde mostrará su lado humano y consciente ante retos que pondrán a prueba la lógica, la lealtad, el deber y la nobilidad de los personajes; estarán siempre presentes los tormentos provocados por la maliciosa, aunque no adrede, influencia del coludo compinche, concluyendo con la muerte del protagonista y la disputa de su alma entre los seres de la luz y el ente con el que se firmó un contrato de sangre.

Sin lugar a dudas, Fausto es una obra que destaca en la literatura universal, crea conciencia sobre diversos temas, se disfruta y es amena; posee diálogos memorables y monólogos que se quedarán grabados en la mente. Una escena imperdible es la del diálogo que sostiene el Doctor justo antes de morir, o aquel que tiene consigo mismo justo antes de entrevistarse con el creador del pecado.

Al final nos preguntaremos realmente, ¿Qué estamos dispuestos a dar por alcanzar nuestros más grandes anhelos?