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Posts Tagged ‘Alfaguara’

Been there, read that (CCCXXXI)

El siglo

Aut. Javier Marías

Javier Marías es un autor español muy laureado que falleció en septiembre de 2022, ya lo tenía en la mira (lectora) desde hace bastante tiempo, sobre todo después de leer algunos fragmentos aislados de cierto conflicto que tuvo con Anagrama, mi editorial favorita, y su representante, Jorge Herralde.

Básicamente, lo que pude dilucidar entre lo poquísimo que se menciona en Un día en la vida de un editor, es que hubo un conflicto de intereses entre la editorial y el autor debido a que la primera liquidaba ediciones no vendidas del escritor, cosa con la que éste no estuvo de acuerdo en lo más mínimo. Si se hace una búsqueda simple en internet acerca del asunto, se entenderá que Javier Marías se erigió como un personaje sumamente conflictivo en el mundo editorial, ya sea porque no aceptaba pagos que consideraba demasiado bajos para la calidad de su obra, ya sea porque no estaba de acuerdo con las adaptaciones que se pudieron hacer de sus textos y las demandas que hizo para ser eliminado de los créditos de tales películas.

Asumí entonces que al ser una personalidad sumamente compleja y conflictiva, su obra debía estar a la altura, pues quienes en el mundo editorial se colocaban del lado de Marías en el conflicto con Herralde pregonaban ‘el gran error de Anagrama’. Lamentablemente, si existe ese nivel de brillantez, no lo hallé en El siglo, y no es porque sea yo sumamente exigente o un crítico avezado, el mismo autor en el prólogo desdeña a este libro y se habla de éste no como lo peor de la obra del español pero definitivamente no como parte de lo más resaltable en su haber.

En esta novela, nos adentramos en la vida de Casaldáliga, un personaje cuyo destino parece estar marcado por la casualidad y las decisiones ajenas. Marías no sigue una línea cronológica estricta, sino que nos sumerge en la esencia del protagonista desde su infancia, donde recibe un consejo clave de su padre: forjar un destino único e irrepetible. Sin embargo, tras descubrir las verdades ocultas sobre su familia, Casaldáliga se ve atrapado en una serie de eventos que lo llevan a un matrimonio impuesto y un exilio durante la guerra, sin encontrar el destino que buscaba.

La novela plantea preguntas sobre la elección, el azar y la verdadera imagen de Casaldáliga, todo ello enmarcado en un lenguaje puro y un ritmo pausado que refleja la esencia del siglo en que vive el protagonista. Además, la música que atraviesa la historia subraya momentos cruciales en la vida del personaje, añadiendo capas de significado a esta profunda exploración de temas como la muerte, la guerra, el amor y la traición, todo ello unificado por la figura central de Casaldáliga.

Primero revolucionario y luego soplón del gobierno, la historia de Casaldáliga no se narra de forma lineal: los capítulos impares se narran en primera persona mientras que los pares en tercera. Hay temas de aristocracia, la presencia de un personaje que se revela como punto de inflexión entre los eventos que llevan al protagonista a exiliarse al lado de una esposa que, se suponía, debió morir prontamente tras la boda.

El siglo es una novela compleja, por supuesto que no cualquiera escribiría algo así. Siendo honesto, no disfruté mucho de la lectura pero comprendí la pluma del autor. A diferencia de lo que me pasó con, por ejemplo, Peter Handke, al que no me quedaron ganas de volver a leer, realmente tengo deseos de buscar alguna de las obras de Javier que estén consideradas como sus mejores. El siglo no es una lectura que le recomendaría a cualquier persona, la verdad es que sólo quien esté interesado en los nombres que surgen en el desarrollo editorial español podrá disfrutar de un texto como este.

Been there, read that (CCCI)

El Tercer Reich

Aut. Roberto Bolaño

Si bien no he leído las obras más emblemáticas de Roberto Bolaño, me dejé atrapar hace algún tiempo por La literatura nazi en América; confieso que la perspectiva de una bibliografía ficticia de extrema derecha me provocaba una inmensa curiosidad, de modo que un título como El Tercer Reich, se antojaba como una continuación o una obra establecida en ese mismo universo (de hecho, sí lo está). Contrario al libro anteriormente aludido, en esta ocasión, tendremos una novela narrada en forma de diario personal del protagonista, Udo Berger. Adoro los libros escritos de esta forma pues hacen su lectura sumamente dinámica y satisfacen, al mismo tiempo, mi compulsión de saber en qué momento del tiempo estoy en cada página y cuántas horas han pasado entre un evento y otro.

Udo realiza unas vacaciones en Cataluña junto a su novia, Ingeborg. El lugar que han elegido es un hotel que antaño vio a Udo y a su familia vacacionar en múltiples ocasiones. La dueña y administradora del hotel es Frau Else, una mujer que cuida a su marido recluido por una enfermedad terminal en una habitación que se mantiene siempre en la penumbra, acaso es él quien mueve los hilos ocultos de la trama. De sobra está decir que existe una fuerte tensión sexual entre Berger y Else. El protagonista es el campeón nacional alemán de El Tercer Reich, lo que le da una cierta condición de celebridad, o lo es al menos en el mundo de estos juegos de tablero de estrategia que emulan la Segunda Guerra Mundial con todas sus disposiciones de unidades militares alrededor del mundo. Precisamente, es la intención del narrador escribir un artículo sobre el juego mientras disfruta de su descanso.

Todo transcurre en la total monotonía hasta la aparición de un conjunto de personajes que darán un vuelco a la psique del narrador. En primer lugar, una joven pareja de alemanes, Charly y Hanna, que no se despegarán de Udo e Ingeborg, y les contagiarán la locura de las vacaciones entre bares, arena y sexo; por otro lado, estarán el lobo y el cordero, personajes locales sombríos que frecuentan un bar venido a menos y que compartirán más que una borrachera con ambas parejas; por último, y más importante, el quemado, un misterioso hombre conocido por las cicatrices que le cubren cuerpo y rostro, que se dedica a rentar patines de playa y que, aparentemente, vive en la misma playa rodeado de los objetos que renta.

Charly desaparece en el mar mientras practica windsurf, Hanna se desespera con el pasar de los días sin tener noticias de él; Ingeborg decide regresar a casa mientras Udo permanece más días en el hotel con el pretexto de esperar a que haya noticias sobre el muchacho desaparecido. Aún cuando la temporada vacacional ha terminado y el protagonista se convierte en el único huésped del lugar, él se mantiene enajenado en una partida del juego que ha entablado con el quemado que, al parecer, empieza a dejar de distinguir la línea entre una guerra real y la del juego de mesa.

Y así, lo que comienza como una historia monótona y simple, se introduce poco a poco en el terreno de lo simbólico y abstracto. El mismo protagonista comienza a perder la noción del tiempo y se ve invadido por la idea de que el quemado lo asesinará si es que llega a alzarse con la victoria en el juego.

El Tercer Reich se publicó en 2010 a pesar de haber sido escrito en 1989, su publicación se llevó a cabo de manera póstuma pues Roberto falleció 7 años antes. Al parecer, la historia permaneció incompleta y fue terminada por su esposa. No sé hasta qué punto de la obra termina lo escrito por Bolaño y comienza lo remendado por su mujer, ese es un detalle que me provoca mucha curiosidad y me hace preguntarme si tal situación no es más que un mito. En fin, una novela enigmática y que al principio podría parecer banal, se convertirá en una historia de final abierto que a más de uno dejará fascinado.

Been there, read that (CCLXXXVII)

La doble vida de Jesús

Aut. Enrique Serna

Desde que conocí los textos de Enrique Serna hace más de 10 años en las páginas de Letras Libres una vez que la elegí como la revista que leería cada mes, me enamoré de ellas, de su mordacidad, de su humor negro, de su capacidad de hacerme desear una bella desgracia. Conforme fui leyendo más y más de su obra, me quedó claro que nunca me decepcionaría y siempre encontraría algo bueno y sórdido de lo cual disfrutar. En efecto, no ha sido la excepción La doble vida de Jesús, una novela política negra que se antoja mucho en tiempos electorales.

En esta ocasión, abordaremos precisamente la vida de un político honesto en ciernes (por inverosímil que parezca), Jesús Pastrana, que se encarga de fiscalizar los gastos y aspira a la alcaldía de Cuernavaca. Como es de suponerse, sobran los corruptos que buscan su complicidad que, al no obtenerla, le ponen el pie a su carrera política. A pesar de todo, Jesús, es un buen hombre y poco a poco va ganando la simpatía del electorado y de una que otra figura de poder que ven en él ciertas oportunidades a largo plazo.

Sin embargo, mientras damos algunos saltos temporales para conocer la juventud de nuestro protagonista, empezaremos a entender dinámicas ocultas dentro de la vida aparentemente perfecta del candidato (casa grande, esposa bella, hijos bonitos); dinámicas que se romperán con la aparición de Leslie, un transexual que vive de la prostitución para sobrevivir. Pronto, Leslie empujará a Jesús a un abismo de amor prohibido que hará tambalear su carrera política. No sólo eso, los temas se complicarán cada vez más conforme algunos miembros del círculo más íntimo del político se enteren del amorío y comiencen a dudar de la lealtad que profesan.

En efecto, nada podría resultar más cercano a la realidad de una sociedad mexicana que dice adorar al que se presenta como honesto pero que con celeridad condenará a quien busque materializar esa honestidad en hacer pública una relación que va en contra de los cánones de una familia tradicional. Cinismo, hipocresía y clasismo, el pan mexicano de cada día.

¿Y si agregamos un poco más de giros en la trama? ¿Qué pasaría si Leslie tuviera un hermano gemelo que además fuese jefe de un cártel de las drogas? Así de intensa se pondrá la narración pues pronto Remedios, la esposa de Jesús, decidirá llevarse a los hijos de su casa al sospechar de las actividades que Jesús lleva a cabo cuando cree que nadie lo ve.

La doble vida es una de esas novelas sórdidas, criticonas, agradables de leer, de esas en las que agarras ritmo y no puedes dejar pues, por el bien del chisme, desearás saber qué pasa a continuación, cuál es la maroma que sacará al «héroe» de la apremiante situación y cómo es que terminará todo, mientras se la mientas a varios de los personajes por aprovechados de la situación. Lectura recomendadísima para los tiempos que se avecinan.

Been there, read that (CCLXXII)

Retrato de Mussolini con Familia

Aut. Mario Bellatin

Esta será una muy breve reseña. A Mario Bellatin lo conozco sólo de oídas; justo al inicio de mi camino como lector, recuerdo haber leído al menos a tres de los cuatro finalistas del Premio Herralde de ese año, entre los que se incluían a Tryno Maldonado, Ivan Thays, Mario Bellatin y, al ganador, Daniel Sada; curiosamente, justo el que no leí en ese entonces fue a Mario. Desde entonces, en múltiples ocasiones he desaprovechado la oportunidad de leerlo hasta el día en que tropecé con Retrato, en la mesa de liquidaciones de cierta librería.

Siendo honesto, puedo comprender que me haya encontrado este libro en 40 pesos: no es la falta de calidad, sino la falta de interés que puede provocar en un lector promedio. No es un libro para cualquiera, es una narración cortísima en la que intervienen dos personajes: un moribundo de un sólo brazo que se encuentra en los últimos momentos de su vida y el sacerdote que se presenta para brindarle los santos óleos; en algún momento, el sacerdote se desnuda y posee el cuerpo del moribundo en un acto en el que ambos reconocen al amor. Sí, así de «experimental» es. Junto a este cruce, una madre acongojada por la muerte del Duce, se niega a sí misma y a su progenie el descanso y el alivio de sus necesidades vitales.

Ambos argumentos se desarrollan a través de pequeñas frases mecanografiadas en trozos de papel que plasman las páginas del libro. Asimismo, los textos se hacen acompañar de ilustraciones de Zsu Szkurka, una dibujante húngara que previamente ya ha compartido la autoría de otro libro al lado del autor. Las imágenes son crudas, de ese estilo que encontramos en las películas de terror en las que un niño puede ver cosas que los adultos no.

De nuevo, no es un libro para el lector común, no puedo decir que lo disfruté. Si bien Bellatin es reconocido por su estilo experimental de escritura, en este caso no puedo imaginar a alguien a quien le pudiera resultar del todo agradable su lectura. Qué se yo, tal vez mi propio gusto lector no es tan exquisito como quisiera imaginar.

Been there, read that (CCLVII)

Lealtad al fantasma

Aut. Enrique Serna

¿Tenemos las riendas de nuestro propio destino o le confiamos el control de nuestra vida a fuerzas que rebasan nuestro entendimiento? ¿Cómo denotar a estas fuerzas cuya comprensión escapa a nuestro raciocinio y que son más fuertes que él? Este es el meollo del asunto en Lealtad al fantasma, el libro más reciente de Enrique Serna, compuesto de 7 cuentos que, en efecto, colocan a los más verosímiles personajes en puntos de quiebre en su existencia.

Un maestro que se ve ahogado ante la pasión que surge entre él y su alumna, la más destacada, cuya vida perfectamente ordenada se encuentra tambaleante luego de las trampas que la estudiante le pone y en las que él cae redondito; «sí deseo lo que deseas, pero déjate puesto tu anillo de bodas». Un hombre que ve literalmente cortada su hombría luego de que una operación de rutina se decante en la desesperación de la poca respuesta sexual después de que el cirujano le «meta cuchillo» aprovechando su inconciencia; pero, ¿es que realmente su impotencia se deba a los efectos secundarios de un procedimiento quirúrgico normal, o es que el cirujano lo hizo a propósito?, es la cuestión cuando el hombre comience a sospechar de una relación entre el médico y su mujer.

Qué tal la historia de la «abuela en brama», una mujer mayor que se enamora de un poeta mucho más joven que ella y al que llevarlo a las reuniones familiares resulta en la peor de las decisiones. Para quienes estén familiarizados con la pluma de Serna, no habrá sorpresas, sólo el goce que provoca la desgracia de los protagonistas de sus historias. Después de leer los primeros relatos, de inmediato acudirá el recuerdo de La ternura caníbal y esos epílogos tristes, vacíos y con un dejo de desesperanza.

En lo personal, Lealtad al fantasma resultó sumamente agradable y bastante adictivo. Si bien su lectura no rebasó el par de días, para alguien iniciado en los textos del otrora colaborador de Letras Libres, su lectura puede ser un poco más lenta. Creo que todo depende de qué tanto disfrutes de la poca fortuna que sufrirán los personajes: ¿prefieres que todo termine rápido o te gusta que el dolor se suscite lenta y pausadamente?

Been there, read that (CCXVI)

El Salvaje

Aut. Guillermo Arriaga

Hacía tiempo que tenía ganas de leer un buen tabique, un librote de esos que pesan y con los que, bien utilizados como arma, puedes noquear a alguien estrellándoselos en la cabezota. No, en serio, un libro gordo o una revista enrollada pueden ser excelentes armas de defensa personal (y aclaro, sólo defensa). En fin, recuerdo haber entrado como en tantas otras ocasiones a la librería preferida y haberme dirigido a la sección de novedades donde se encontraba El Salvaje y que éste ostentaba un pequeña calcomanía, «Premio Mazatlán de Literatura 2017». La verdad es que, en la mayoría de casos, una mención como la que hacía la calcomanía, me basta para adquirir un libro, rara vez un jurado se equivoca al evaluar un buen libro aunque, como en todo, a veces aparecen excepciones.

Curioso es que, dentro de mi infinita ignorancia, me estaba llevando el libro de un escritor al que conocía muy bien sin saberlo. Fue hasta el año que recién terminó, 2020, que en la celebración del 20 aniversario de una de mis películas favoritas de toda la vida, Amores Perros, reconocí a Guillermo Arriaga como el escritor de la historia junto a las de Babel y 21 Gramos. Fue cuando decidí que ese libro que compré y del cuál me desentendí, sería el siguiente en la fila de mis lecturas habituales.

Debo reconocerlo, llevaba apenas 60 de las 700 páginas de la historia y comencé a sentir flojera de su lectura, pospuse su continuidad por casi 4 meses y me interesé por obras más cortas; sin embargo, una vez instalado en el hogar paterno para las vacaciones decembrinas, decidí ya no darle cuartel. Cerré y comencé año con una lectura concienzuda que me atrapó una vez que pude dilucidar el centro de la narración: fanatismo, asesinato, venganza y redención.

Por supuesto que reconocí la narrativa del guionista de Amores Perros: historias que se enlazan y que se narran por separado, cambios entre las narrativas cuando más concentrado estás con el avance de alguna de ellas. La historia principal es la de Juan Guillermo, alias el «Cinco», que a sus 17 años se ha visto acosado por la presencia de la muerte con un hermano asesinado, una abuela fallecida, unos padres que se han suicidado. Su historia se divide en una narración en dos momentos: el primero, el de su historia temprana y sus primeros acercamientos sexuales en una escuela de paga que con grandes sacrificios de los padres apenas y se puede pagar, hasta el momento del asesinato de su hermano; el segundo, el del momento actual en el que deambula por una casa vacía atormentado por las muertes que se han suscitado una tras otra a partir de la su hermano, la búsqueda de venganza contra un grupo de «buenos muchachos» fanáticos de dios que se encargaron de integrarlo en sus filas con el objeto final de tenderle una trampa a su hermano para poder asesinarlo.

La historia secundaria, en un principio, es la Amaruq, un indígena canadiense que busca cazar a un gran lobo, Nujuaqtutuq, «el salvaje». Y digo que en un principio porque a las tres cuartas partes del libro, nos daremos cuenta de que el verdadero protagonista de esta historia secundaria es el lobo y todo lo que sufre para llegar a un destino final donde será el padre de otro lobo que terminará siendo la mascota de los vecinos de Juan Guillermo. Ahí la sútil unión de las dos (tres) historias.

Si bien al inicio la historia es un poco floja, una vez que el trío de de narraciones se van acercando a un punto común, es imposible no clavarse. Cada que te acercas a lo que ya deseas saber, el autor decide retornar a alguna de las otras historias mientras alterna páginas con poesía, historias y datos curiosos que enriquecen a la línea principal. Como una buena serie televisiva, los cliffhangers son constantes y provocan el deseo de llegar pronto a la continuación de la historia para satisfacer la curiosidad y el deseo de saber qué pasa a continuación.

Sí, es pesado leer una historia de 700 páginas, pero llega ese punto en el que es difícil no dejarla ir. Es fácil imaginar los lugares y los personajes como parte de un universo cinematográfico que sólo el compañero del autor, Iñárritu, podría filmar. Se nota esa relación. No lo recomiendo para un lector casual, pero un lector casual que disfrute mucho de las películas en las que Arriga ha sido copartícipe, sin duda podría clavarse. Gran novela con fuertes mensajes.

Mi 2020 en libros…

Been there, read that (CCX)

Cuentos de maldad (y uno que otro maldito)

Aut. Alma Delia Murillo

Apenas comienza octubre y se empieza a sentir el ánimo festivo en torno al día de muertos y sus equivalentes anglosajones, así que, ¿por qué no leer algo que tenga un cráneo en la portada? Técnicamente esa fue la lógica al escoger Cuentos de maldad como mi siguiente platillo literario.

La verdad es que los cuentos que forman parte de esta obra se insertan muy bien en el ambiente de la temporada; sin embargo, siempre me ha costado dar opiniones en torno a libros como este pues de un conjunto de historias me es difícil establecer un veredicto colectivo.

En fin, hablemos pues del libro en general: 20 cuentos cuya temática principal gira en torno a la maldad, el título no miente, y a los malditos que los protagonizan. Una mezcla de humor negro, acontecimientos reales e impulsos que todos hemos tenido en algún momento de nuestras vidas, le dan a estas historias ese pequeño algo que provoca una sonrisa al llegar a los desenlaces de cada narración. En efecto, en más de una ocasión solté una carcajada al darme cuenta de lo obscura que se puede tornar nuestra imaginación al ponernos en los zapatos de aquellos que ya estamos hartos del mal trato de los empleadores o del pésimo servicio en un banco.

Desde incipientes asesinos en serie que descubren el placer que provoca el primer homicidio, como el de la chica que nació producto de una violación y cuyo «padre» también intentó abusar de ella o el de la cougar que secuestra al hijo de su mejor amiga para utilizarlo como esclavo sexual, hasta objetos inanimados como una mesa enamorada del escritor que la ocupa a diario que en un arranque de celos decide asesinarlo o una casa que hace hasta lo imposible por deshacerse de su inquilina, los personajes son variados y sumamente identificables y ajustables a nuestra realidad.

¿Quién no ha querido asesinar a los ejecutivos bancarios que se burlan de las personas de escasos recursos que requieren de su ayuda? ¿Quién no ha deseado el mal a la amante del jefe que nos provoca tantas pasiones escondidas? ¿Quién no desea la venganza nacida desde lo más profundo de nuestro ser? Todo esto es lo que se ve reflejado en las historias de Murillo.

Mi favorito fue La rebelión de los de en medio, el ataque minucioso de dos Godínez dispuestos a ya no soportar el abuso de sus empleadores. La autora defiende su obra de aquellos que se puedan ofender, «sean pues estos cuentos, mi manera de rebelarme contra el pensamiento rígido y contra tantas chingaderas que ocurren como resultado de eso». El libro se va como agua una vez que lo empiezas.

Been there, read that (CLXXXVIII)

La tarde de un escritor

Aut. Peter Handke

EAL89742Desde hace algunos meses, cuatro o cinco, leí una pequeña reseña de Carta breve para un largo adiós de Peter Handke, que recién había sido galardonado con el Nobel de literatura, y desee leerlo con demasiada urgencia. Como tengo tanto libro pendiente por leer, ya no voy y pido en línea cada libro que me interesa sino que, dándole su parte al destino, espero a encontrármelo en alguna visita incidental a cualquier librería. Precisamente, no me he topado en ninguna ocasión con Carta breve, pero sí con La tarde de un escritor que, aunque no sustituyó el deseo, sí logró mantener a raya mi obsesión con el otro título.

La verdad es que no disfrute mucho de esta ¿novela?, como su título lo dice, es la narración de la tarde de un escritor. Un día frío de invierno, el protagonista se levanta y decide deslizarse hacia las afueras de la ciudad a uno de sus lugares favoritos donde la soledad representa el insumo principal de su labor; una vez saciado el deseo de estar solo, decide pasearse por los distintos barrios de la ciudad, hasta pasar por el centro, donde teme y al mismo tiempo añora ser reconocido, para, finalmente, refugiarse en «la guarida» donde apreciará la distante compañía que borrachos y bohemios le hacen durante algún tiempo.

Al final, regresa a su casa, cabila un poco sobre lo que cada paso que dio durante el día significó para sí mismo y para su relación con el mundo; luego, procedió a dar por terminada esa larga introspección de 113 páginas.

No lo sé, no me convenció, no me enganchó, no encontré una enseñanza ni un mensaje que pudiese reproducir para un tercero. Pero, ¿quién soy yo para juzgar a un Nobel de literatura? Probablemente no lo entendí lo suficiente, pero quién sabe. Mi deseo de leer Carta breve es el mismo y mantiene la misma magnitud, espero encontrar algo diferente ahí o de plano Handke y yo no podremos reconciliarnos jamás.

Been there, read that (CLXXXII)

El día que no fue

Aut. Sandra Lorenzano

81BsuBkMHHLEste definitivamente fue un libro complejo, sumamente complejo. En un principio, cuesta trabajo dilucidar la intención de la historia con que nos encontramos: definiciones del miedo, poemas a las desaparecidas y asesinadas, cartas a un amor peligroso que ya no es, temor a la venganza, incomprensibilidad a la falta de empatía de quienes nos rodean.

El día que no fue es la narración en primera persona de una mujer anónima que abandonó la zona de confort de una relación tradicional para encontrarse con el verdadero amor en una mujer que, muchos años después, terminará abandonándola por causas sumamente juveniles; a saber, un correo electrónico con un tono demasiado amigable que la protagonista ni siquiera contestó. A partir de ahí, todo se traduce en miedo. Ese miedo que teníamos de que la persona más cercana, aquella que conoce absolutamente toda nuestra vida, nuestras motivaciones y nuestras ilusiones, se convirtiera en el peor enemigo.

Pero el miedo de esa situación se exacerba. La protagonista piensa que X se aparecerá cualquier día para asesinarla, y eso la transporta a otras épocas, otros países, otras situaciones. El miedo a las dictaduras, el miedo a desaparecer de un día para otro sin que nadie pueda hacer nada para evitarlo. Piensa en el número de veces que una mujer puede gritar antes de ser asesinada, piensa en las mujeres exiliadas y piensa en las mujeres que lucharon y se rebelaron.

El miedo está siempre presente, el miedo nunca se irá. Pero de eso a que se materialice, hay un largo trecho. Nos encontramos con una novela que es, al mismo tiempo, un largo poema, es difícil encasillar todo en un género. Sin duda es una lectura sumamente actual, le leía mientras mis redes se llenaban de noticias sobre las marchas feministas y el grito desesperado en contra de la violencia de género. Jamás me sentí tan inmerso en un tema que por momentos se figura tan ajeno.

A pesar de su corta extensión, no es un libro que se digiera fácilmente, requiere sus momentos de reflexión. Es una historia que se debe pensar en interiorizar. Es una obra que ayuda a ponerse en los pies de toda mujer que se encuentra harta de sentir miedo, de no saber cuándo le puede tocar a ella, de no encontrar descanso de aquello que más teme.